Estoy casada y feliz, por lo que de "cacho" no le viene a mi marido -hasta el momento.... Pero si le cae de perillas al ex de una amiga, quien con alegría (no sé si fingida, vaya a saber uno ) me cuenta en medio de los sorbos de la caipirinha del aperitivo del asado que "al fin me deshice del cacho de mi marido". Casi sin respirar y mientras yo trataba de recordar si este ex era el mismo prometedor ingeniero, de buena familia y grandes ambiciones con el cual se casó hace dos décadas, Verónica me cuenta que "me cansé de cargar con ese vago. Lo mantuve durante seis años así que afortunadamente se fue de mi vida....".
La verdad es que no esperaba un juicio tan duro de Verónica, pero me relata variadas historias del cachito. Que mientras ella se mataba trabajando y cuidando a las niñas, el sujeto creía que tenía que trabajar sólo para él y se daba unos gustos de soltero, que !ni te cuento!, que salía los jueves con sus amigos, que el sábado iba a la liga de no se qué colonia y seguía a la Selección a todas partes, sin importar que el colegio del mes no estuviera pagado. Nos reimos mientras Lorena interrumpe para decir que seguramente era tan flojo como su ex, quien estaba convencido que los fines de semana eran para atendido como un sultán. Con curiosidad pregunto a Verónica que pasó con su ex y me cuenta con un gesto de alivio que se volvió a casar y tiene una guagua nueva. "Afortunadamente para mí, con una mina más joven, para que lo mantenga", jaja.
lunes, 27 de julio de 2009
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