viernes, 5 de junio de 2009

Manejo del Tiempo

A veces reclamo porque siento que paso el día apagando incendios o haciendo cosas necesarias, urgentes, pero que al final del día inútiles. Mi amiga Ximena me aclaró el tema con un buen ejemplo: pasarse el día haciendo las cosas que “debo hacer hoy” implica pasársela contestando el mail, llamando por teléfono, asistiendo a reuniones, etc. Lo importante es planificar para que las horas no se esfumen entre los dedos.


¿Cómo hacerlo?

Hacer una buena planificación estratégica que incluya nuestros objetivos a mediano y largo plazo, es decir estudio para la prueba de mañana, pero también me preocupo del trabajo que tengo que entregar en dos semanas. Administro mi vida sacándole el jugo a las 24 horas, para que cuando me entregue en la noche al control remoto no sienta que el día "pasó en banda".

Una profe amiga me entregó unos truquitos. Se los comento:

1.- Plantéate metas reales, medibles y alcanzables sobre lo que realmente quieres hacer. ¿Seguir un curso?, ¿Ir al gimnasio? Así el día se enfocará en torno a lo importante.

2. Escriba pendientes. Ximena ocupa un cuaderno tipo college para anotar ordenadamente lo que tiene que hacer y un corrector blanco para eliminarlos cuando los logra .

3. No te disperses. Si usa este cuaderno para sus pendientes laborales, hay que dejarlo en la oficina para llegar a su casa con la mente aliviada y concentrarse. Nada que ver con estar en un café torturándose con el Pendiente número 48…. Además, el que mucho abarca....poco aprieta.

4. Bendito orden: Mantener el escritorio, la pieza o el lugar de trabajo sin papeles arrumbados ayuda a descansar la mente y disminuye el estrés. ¿Qué hacer para lograr tener un lugar despejado? Los japoneses recomiendan no mover un papel si no se tiene la intención de hacer algo con él. O sea, cada vez que nos llegue un mail o documento lo que se puede hacer se reduce a: Delegar, Archivar, Tramitar o Tirar.

6. Usa la agenda. Cumple las actividades programadas y aprende a decir que no a actividades que interrumpan esta programación. O sea si te invitan a ir al cine cuando te comprometiste a estudiar con tu amiga para el examen de dos días, no aceptes. Y cuando aceptes una invitación ¡hazlo y no postergues!.

A mí estos trucos me dan resultado y siento que avanzo en el logro de mis metas y que el día me rinde un poco más.